EL ÓRGANO BARROCO
Una breve historia sobre el instrumento
HISTORIA
El órgano de Fuentesaúco de Fuentidueña no fue construido en esta localidad. De hecho, tampoco se sabe su procedencia exacta pues no hay ningún tipo de escrito ni testimonio alguno que certifique ni la compra ni el traslado del instrumento, tan solo esas "habladurías" entre vecinos que han sido transmitidos por tradición oral.
Así pues, para conocer su origen hacía falta acudir al conocimiento de los expertos, los cuales podían arrojarnos un poco de luz sobre la procedencia del instrumento. Y aquí es donde contamos con la inestimable ayuda de nuestros amigos de la "Asociación Cultural Organaria" de Valladolid, los cuales realizaron un exhaustivo examen al instrumento y nos ofrecieron un dossier detallado con todo tipo de información relativa al instrumento.
Atendiendo a dicho informe podemos sacar conclusiones muy precisas sobre el posible origen del instrumento. Por ejemplo, hay varios testimonios gráficos (imágenes, pinturas...) en el propio instrumento que lo asocian con la obra y milagro de San Basilio (siglo IV, obispo de Cesárea y padre del monaquismo oriental). La única conexión directa que pudiera haber entre el instrumento musical y dicho obispo era el antiguo convento de los Basilios de la localidad de Cuéllar (a 20km al oeste de Fuentesaúco). Así pues, todo apunta a que este instrumento fue el órgano construido para dicho convento entre 1710 y 1719 y que posteriormente fue reemplazado por otro en el año 1832 (obra de Tomás Ruiz Martínez y su hijastro Félix Pérez). En la citada operación el antiguo órgano sería trasladado a la iglesia de Santa María de la Cuesta, en el mismo Cuéllar, hasta que finalmente fuera comprado por la parroquia de Fuentesaúco de Fuentidueña en el año 1841. Y aquí sigue desde entonces.
SU CONSTRUCTOR
Continuando con la información vertida en dicho informe, este órgano pudo ser construido por el organero de Peñafiel: Manuel Miguel Sancho. Los diseños utilizados en los laterales mantienen el mismo patrón empleado en el órgano de la parroquia de San Cebrián de Campos (Palencia), un órgano documentalmente asociado con el citado organero. Además, este es casi el único maestro organero conocido en las inmediaciones de la zona en los comienzos del siglo XVIII. El otro conocido (Francisco Ortega) trabajó más para la zona sur de la provincia de Segovia.
SU ADQUISICIÓN
Dado que el órgano pertenecía ya a la mencionada iglesia de Santa María de la Cuesta (de Cuéllar), no hubo que hacer petición de adquisición a la Junta de Bienes Desamortizados de Segovia. Por lo tanto, el instrumento fue adquirido directamente en dicha iglesia. Según datos de L. Reinoso, el órgano costó 1350 reales y fue el organero Francisco Sancho el engargado de apear, trasladar y montar nuevamente el órgano, tarea por la que recibió 1410 reales.
VICISITUDES POSTERIORES
En el año 1864 se realiza una importante revisión y reparación por los organeros Manuel Marrodán y Mariano González, organeros afincados en Calahorra, por valor de más de 2500 reales. Dicha reparación, si bien en origen buscaba reemplazar tubos y la revisión del secreto y lengüetería de la fachada del instrumento, acabó con el reemplazo de los fuelles originales por un sistema más actual.
ESTADO ACTUAL
El posterior declive en el uso del instrumento así como diferentes sucesos durante el siglo XX han hecho que el instrumento esté en un estado bastante malogrado, impidiendo además su uso. Además, las obras y reformas que se realizaron en la iglesia a finales del siglo XX prácticamente acabaron con el instrumento, ya fuera por el ninguneo de los obreros o porque el órgano representaba un obstáculo entre las dos secciones del coro de la iglesia. En resumen, el instrumento presenta importantes daños en las superficies y en el mecanismo, pero su rehabilitación es aún posible.